En mitad del camino y sin mirar atrás se puso a correr, el bosque con su espesura le estaba esperando, una vez dentro todo sería diferente ,nadie le encontraría.
Según
iba entrando sentía el roce de la brisa en su cara y como las ramas
de los arbustos a modo de barrera trataban de impedirle el paso, pero
él con el ímpetu de su cuerpo conseguía doblegarlas , el canto de
los pájaros le animaban a seguir adelante mientras en la lejanía
unas voces le repetían que no huyese , que ellos le darían alcance
y todo acabaría, pero él tenía que cumplir su objetivo y nadie
lograría impedírselo.Imagen bajada de Internet
De él dependían todos , en medio de la espesura del bosque algo le llamó la atención haciendo que frenara su carrera, pero al instante volvió a retomarla ya que las voces que lo perseguían las sentía más cerca , estaban a su lado repitiendo que dejase de correr que todo se había acabado , que se rindiese y nadie saldría herido.
No podía parar ,sabía que faltaba poco pero de repente un olor nauseabundo le hizo frenar en su carrera , un vómito le obligó a parar en seco y al instante la obscuridad lo invadió todo. Un grito fue el detonante para que todo acabase.
¡¡¡ Socorro, socorro que me quieren matar!!!
— Cariño, despierta y suéltame el camisón, que me haces daño y límpiate ese vómito , parece que te sentó mal la cena , y por favor deja de ver tantas películas de gánsteres.
Hola, Puri.
ResponderEliminarEl subconsciente que malo es, ja, ja, ja Menuda noche frenética pasó el pobre.
Si que debería de dejar de ver ese tipo de películas si le hacen tener estas pesadillas, :)
Un abrazo.
Es que el cine es una gran cosa, y sobre todo cuando nos sugestiona de tal manera que hace creible cualquier escena o situación! Je, je! Los sueños a veces parecen tan reales como una buena película! Je je! Un abrazote Puri!
ResponderEliminarJajaja, muy bueno Puri. Casi estaba yo corriendo con él para animarle y resulta que era una pesadilla, o que efectivamente le sentó mal la cena como le dijo su mujer, y se la provocó.
ResponderEliminarMe ha encantando.
Un abrazo.