Desde hacía meses cada mañana al levantarse iba directamente al espejo y exclamaba: ¡ Otro más ! , acto seguido lo metía en una bolsita donde le esperaban sus compañeros.
Cuando se percató de que padecía Falacrofobia su vida cambió por completo, no dormía, apenas comía y dejó de relacionarse con los demás ,hasta tal punto que le cambió el carácter, convirtiéndose en un hombre huraño motivo por cual su mujer le abandonó y sus hijos apenas lo iban a visitar.—Esto es lo que necesito, comenta mirándose en el espejo, así volveré a ser el de antes
Acto seguido fue a buscar la bolsa donde los guardaba y se puso a contar ,uno, dos, tres, cuatro …. y así hasta 50 , al verlos todos juntos se desmoronó y fue directamente al teléfono a pedir cita.
Llegado el día se presenta en la clínica y al entrar en la consulta el médico le pregunta
—¿Está decidido a hacerlo ?
En silencio abre la bolsa y la vacía sobre una mesita
—¡Que hace hombre esto no funciona así! esos ya no valen, están muertos y bien muertos por lo que se puede ver
— Pues otros no tengo
— Mire señor, aquí lo que hacemos es extraer de raíz los que están vivos de donde tiene muchos y ponerlos donde le faltan
—¡¡ Qué, de eso nada !!Entonces no me interesa. Quitarme lo vivos , a quien se le cuente ,comenta el hombre mientras sale refunfuñando de la consulta
Pues quedó muy divertido. No hay nada pero que no aceptar la calvicie.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola Albada en este caso parece que no pensaba aceptar la falta de pelo.
EliminarTe agradezco que pasaras y dejaras tu comentario.
Un abrazo
Puri
jajajajajajajajajja
ResponderEliminarBuenisimo!!!Que lindo leer relatos de nos sacan una sonrisa!!! Bello dia y gracias!!!
Hola Eli me alegra que mi relato te arrancara una sonrisa.
EliminarTe agradezco tu visita y el comentario.
Un abrazo
Puri
Vaya, miedo a perder cabellos, es algo muy terrible pues quedo solo sin mujer y sin familia.
ResponderEliminarUn relato bastante humoristico, muy bueno
Hola Jose mi protagonista sufre una fobia muy severa ya que todo lo que le rodeaba lo perdió por culpa de ella.
EliminarAgradezco mucho tu visita y el comentario.
Un abrazbo
Pui
Jajaja, muy simpático este relato, me ha hecho mucha gracia que llevara todos los pelillos que se le habían caído, jajaja.
ResponderEliminarTienes una imaginación estupenda y cuentas muy bien todo lo que escribes.
Me ha encantado. Un abrazo Puri.
Hola Elda el lo fue guardando por si pudieran hacerle falta je je je.
EliminarTe agradezco tu paso por aquí y tu comentario.
Un abrazo
Puri
Excelente o teu relato!
ResponderEliminarNa verdade existem fobias que são uma angústia permanente!
Gostei! A forma como escreves, tem um registo muito bom.
Un abrazo!
Hola Albino me alegra que disfrutes leyendo mis historias.
EliminarGracias por venir y comentar
Un abrazo
Puri
Los de la clínica se libraron de un cliente exigente y molesto... por los pelos.
ResponderEliminarUn saludo.
Hola Cayetano tiene toda la pinta de que este sería un paciente muy pesado.
EliminarTe agradezco que vinieras y comentaras
Un saludo
Puri
Hola Puri , la verdad es que ganaron en tranquilidad o si no
ResponderEliminarque se comprase un "Peluquín" que es más económico ,jajajajajaj
te deseo una feliz semana , besos de flor.
Hola Flor no seria mala idea lo del peluquín ji ji ji.
EliminarGracias por acercarte y comentar.
Besos amiga y cuidate
Puri
¡Hola, Puri! Desde luego que tu personaje tenía muy claro aquel dicho de desvestir a un santo para vestir a otro. En este caso quitar pelos de una zona para cubrir esa calva. Muy divertido el micro y muy bien resuelto. Un abrazo!
ResponderEliminarHola David mi prota no entendió el anuncio y volvió a su casa con los pocos pelos que le quedaban.
EliminarMuchas gracias por venir y comentar.
Un abrazo
Puri
Yo hace tiempo que prefiero sacarle brillo a la calva que tratar de buscarle una solución.
ResponderEliminarSimpático relato.
Un abrazo.
Hola Chema y la luces bien brillante y con gracia como debe ser.
EliminarTe agradezco tu paso por aquí y el comentario.
Un abrazo
Puri
Este no tenía un pelo de listo.
ResponderEliminar;)
Besos Puri.
Hola Alfred creo que los pocos que le quedan los tiene de tonto.
EliminarAgradecida por la visita y el comentario.
Besos
Puri
Hola, Puri! Tan lindas que son algunas calvas. Como la de Bruce Willis...
ResponderEliminarEn fin, hay que saber llevarlas. Y no solo los hombres. Conozco un par de mujeres que vistas de costado muestran sus calvas apenas cubiertas por una sombrita de pelo.
Muy buen micro.
Un abrazo
Hola Mirna parece que mi prota no se ve como Bruce Wills el quiere recuperar su pelo.
EliminarAgradezco tu visita y que hayas comentado.
Un abrazo
Puri
No muy buena la solución... pero sí un estupendo relato.
ResponderEliminarUn abrazo, Puri.
Gracias Amalia por dedicar un rato de tu tiempo a venir y comentar.
EliminarUn abrazo
Puri
Estoy en camino de quedarme calvo, bueno..., en realidad llevo 15 años quedándome calvo. Se podría decir que el protagonista no tiene ni un solo pelo de tonto. Buen relato, un abrazo.
ResponderEliminarHola R.R lo de perder el pelo no se suele llevar bien y mi prota pensó solucionarlo a su manera y no dio resultado.
EliminarTe agradezco que vinieras y dejaras tu comentario.
Un abrazo
Puri
¡Cómo va a ser eso! Quitar los vivos y ponerlos en otro lugar. Je, je, je. Te ha quedado un relato muy divertido.
ResponderEliminarEnhorabuena.
Un abrazo.
Hola Bruno me alegra que pasaras un rato divertido leyendo el micro relato.
EliminarGracias por venir y comentar.
Un abrazo
Puri
Hola Puri!! ay qué bueno por favor, los pelos vivos arrancados de cuajo, cuando le quedan tan pocos. La imagen de recoger los pelillos desfallecidos en el suelo, es genial. Gracias. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Emerencia, es que este hombre teme quedarse sin pelos y los que le caen los guarda por si le valen ji ji ji.
EliminarMe alegra tu visita el comentario. Gracias.
Un abrazo.
Puri
Muy divertido, Puri y muy agradable de leer. Muy verosímil la fobia también, jeje.
ResponderEliminarHola Marta me alegra que disfrutaras leyendo la vida de mi prota. Es un poco especial con sus problemas capilares.
EliminarAgradezco que pasaras y dejaras un comentario.
Un abrazo
Puri
Hola Puri, un placer leerte. Muy divertido el relato, una fobia muy real y bien contada. Menos mal que el protagonista no viajó a Turquía que si no … ja,ja,ja. Un saludo
ResponderEliminarHola Pedro, me alegra que vinieras y comentaras, encantada de recibirte.
EliminarSeguro que si viaja a Turquía llevaría los pelos que tenia guardados en la bolsita para que se los pegaran donde le habían caído.
Un saludo
Puri
Con lo que se lleva ahora un melón bien afeitado. Una fobia y un complejo sobre todo en gente joven, con el tiempo casi agradeces estar calvo. Desde calvos sin fronteras ONG un abrazo y enhorabuena por el micro.
ResponderEliminarHola Ángel, es que esto de las cabezas afeitadas es una moda que mi protagonista no comparte, su fobia le supera y por eso desea poner fin a ella .
EliminarEncantada de recibir al señor de la ONG calvos sin fronteras je je je , y de leer su comentario.
Un abrazo
Puri
¡Pero qué caprichoso es el mundo de "los pelos"! Por un lado está los diversos métodos depilatorios: láser, cera, etc... y por otro los injertos. ¡Dónde se ponga un calvo digno!, no hay nada más feo que esos calvos que se dejan crecer los cuatro pelos que les quedan para cubrir engomados la parte escasa, parece un código de barras.
ResponderEliminarTu pobre protagonista me recordó a la peli "la escopeta nacional" de Berlanga, ¡grande Berlanga!, en la que un marqués coleccionaba vello púbico en frasquitos de cristal de las mujeres con las que había estado. Mucho más lúdico el marqués (interpretado por Luis escobar), que tu acomplejado chico.
Un beso, Puri.
Hola Isabel hay calvos que llevan su calva con alegría y otros como mi protagonista lo lleva fatal de ahi que decida buscar soluciones y la que encontró no fue precisamente como esperaba.
EliminarGracias por acercate y comentar.
Besos compañera.
Puri
Nada, nada; rapado se está más cómodo; y lo que te ahorras en peluqueríasssss :-D
ResponderEliminarUn beso Puri
Mi protagonista debido a su fobia no se percató de esa ventaja, je je je .
EliminarEncantada de recibir tu visita y leer tu comentario. Gracias
Besos Gumer
Puri
Divertido el relato, pero tener fobia, jajaja. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Mamen, es lo que tienen las fobias que no razonas y como la pasó a mi protagonista te puede cambiar la vida por completo.
EliminarGracias por acercarte y comentar.
Un abrazo
Puri
jajaja que gracioso fue leer el relato, aunque te confieso que eso de perder "los pelos de la cabeza" no me hace ni chispa de gracia! Sin llegar a la fobia, me da terror 😯 Un abrazo 🐾
ResponderEliminarHola Rosa, lo de perder pelos que se lo pregunten a mi protagonista, el hombre lo lleva fatal de ahí su fobia.
EliminarAgradezco tu paso por aquí y que comentaras.
Un abrazo😉
Puri
Hola, Puri. Hay que leer la letra pequeña de los anuncios, si no pasa lo que al protagonista que tampoco conoce las procesiones de calvos que acuden a Turquía para un implante donde hacen lo mismo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Isan es que la letra pequeña poca gente la lee de ahí que como tu dices luego pasa lo que pasa y sino que se lo pregunten a mi protagonista.
EliminarEncantada de recibirte por aquí y leer tu comentario. Gracias
Un abrazo
Puri
Hola, Puri. Yo me curé de eso y mucho más barato. Me compré un rotulador permanente de punta fina y allí donde hubo dejo la marca, así cada día. Ahora mi cocorota parece la de un dibujo animado y cuando me miro en el espejo me río como si al otro lado viera al mismo Mortadelo. Saludos 😂🖐
ResponderEliminarHola JM buena solución la tuya, tendrás que patentarla je je je . Además cambias el peine por el rotulador permanente que bueno ji ji ji . Sentido del humor que no falte , que recuerdos las aventuras de Mortadelo uff.
EliminarGracias por venir a dar una vuelta por aquí y comentar.
Saludos😊👍👍
Las publicidades son cada vez más confusas...
ResponderEliminarSaludos,
J.
Hola Jose A. no se puede uno fiar de la publicidad, y menos cuando no lees la letra pequeña.
EliminarGracias por venir y comentar
Saludos
Puri
ja ja.. De verdad que se salvó del gasto de la clinica por los pelos. Muy divertido relato. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Octavio, si mi protagonista como se suele decir se salvó por los pelos je je je
EliminarAgradezco tu visita y el comentario
Un abrazo
Puri
El que no tiene esa fobia, es que no la sufre en sus pobres y desaparecidos pelos, jajaja. Muy gracioso, Puri. ¿Qué se pensaría él que iban a hacerle? XD.
ResponderEliminarUn abrazo!
Hola Pepe, esa fobia la sufren en silencio algunos, pero mi protagonista la sufría en alta voz y de ahí su sufrimiento. Lo que quería era aprovechar sus pelos muertos y ponérselos donde le habían caído je je je .
EliminarAgradecida por venir hasta aquí y por el comentario.
Un abrazo
Puri
¡Hola! Ésta fobia en particular no la conocía, a los hombres por lo general no les gusta estar calvos pero tener una fobia a ello debe ser muy dolorosa. Afortunadamente hay tratamientos, incluso pelucas muy realistas. Lástima que tu protagonista no comprendiera que era para ayudarlo. Buena historia. Saludos...
ResponderEliminarHola Ana, es lo que tiene sufrir una fobia, que no ves razones que te animen a superarla y conviertes tu vida en un auténtico drama.
EliminarGracias por dedicar un rato de tu tiempo a pasar y comentar.
Saludos
Puri
Hola Puri, como de costumbre nos sacas unas buenas sonrisas con tus micros. Este te ha quedado por los pelos, ja, ja. ¿Cuales pelos importan mas?, ja, ja.
ResponderEliminarQue pases una estupenda semana.
Hola Harolina, hay pelos que se pierden y no vuelven a nacer y son esos los que le preocupan a mi protagonista, por eso él los guardaba con todo el cariño je je je .
EliminarRecibo encantada tu visita y también leo tu comentario. Gracias.
Un abrazo
Puri
Hola Puri. Debe ser traumático eso de perder el pelo, aunque bien pensado hay cosas peores. El pobre hombre siempre podrá recurrir a una peluca si no le agrada eso de poner los vivos donde estaban los ya muertos. Divertido micro. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Jorge, es que el hombre iba con toda ilusión a que le pusieran los pelos muertos en su sitio y la salen con esa otra terapia je je je . Eso le pasa por no enterarse como era todo el proceso de replantación de pelo.
EliminarGracias por tu venir y comentar.
Un abrazo
Puri
Creo que es una buena ocasión para raparse a cero o afeitarse la cabeza. Dicvn que ahora es de moda.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Francisco esa sería otra solución aunque con la fobia que padece mi protagonista creo que la cosa empeoraría.
EliminarAgradezco tu visita y el comentario.
Un abrazo
Puri
Gostei do teu relato. Bem divertido e que, na realidade, acontece frequentemente.
ResponderEliminarPrecisamos ter muita atenção aos anúncios!
Un abrazo!
Gracias otra vez por pasar por aquí y comentar. Los anuncios son peligrosos, no hay que fiarse de todo lo que dicen.
EliminarUn abrazo A.S
Puri
¡Qué bueno! No sé cómo se hace el trasplante de pelo, pero visto así... no parece muy lógico, ja, ja, ja.
ResponderEliminarEstoy con tu protagonista, así no vale.
Un beso, Puri.
Hola Paloma, mi protagonista tenía claro que él quería que le pusieran en su sitio los que le habían caído por eso los guardó en la bolsa je je je.
EliminarGracias por pasar un rato por aquí y comentar.
Un abrazo
Puri
Hola, Dulcinea! Había oído hablar de esa fobia y de otra bastante curiosa: Barbafobia, o miedo a cortarse el pelo.
ResponderEliminarUn vecino mío se hizo unos injertos de prueba y afortunadamente no ha seguido adelante pues le quedó ese efecto de "pelo de muñeca" aunque le prometieron que se vería de lo más natural. Dicen que los trasplantes que se hacen en Turquía son buenos, no sé...
Saludos, Puri!
Borgo.
Hola Miquel lo de los injertos no suelen salir bien por lo que se oye por ahí, aunque el otro día vi un reportaje en la sexta sobre este tema y la cosa ya va saliendo mejor y no hace falta irse a Turquía.
ResponderEliminarLo malo es sufrir la fobia y no poder solucionarla como le pasó a mi protagonista.
Gracias por dedicar un rato de tu tiempo a venir y comentar.
Saludos !!👋👋
Puri
Hola, Puri, has hecho con esta fobia algo peculiar y divertido, solo imaginar al hombre contando los pelos..., además muertos, jajaja. En cierta forma razón no le falta, él quiere los vivos.
ResponderEliminarUn placer de lectura.
Saludos, y feliz resto de semana;)
Hola Mila este hombre es muy amante de sus pelos y por eso quiere ponerlos en su sitio ji ji ji.
EliminarGracias por venir a dar una vuelta por aquí y comentar.
Saludo y feliz finde.
Puri
¡Hola,Puri! Esta fobia es bien peculiar. Aunque lo de transplanarte tu propio pelo. ¿ Y de dónde pues? ajajajaj. Te ha quedado un relato fantástico, con su pizca de buen humor y todo.
ResponderEliminarNos leemos
Hola Jose me alegra que pasaras un rato divertido leyendo esta peculiar historia.
EliminarUn saludo y buen finde.
Puri
Si es que lo de desvestir un santo para vestir a otro, casi nunca ha sido un remedio a gusto de todos.Me ha gustado el micro.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Carles ese refrán no siempre da resultado como tu dices.
EliminarMe alegra recibir tu visita y leer tu comentario.
Un abrazo
Puri
Muy divertido Puri. Si yo guardara todos los que se me caen tendría para hacerme una peluca.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Conchi eso es cierto en determinadas fechas del año suele caérsenos a todos lo bueno es que nos nacen otros nuevos.
EliminarGracias por venir y comentar
Un abrazo
Puri
Para este hombre era peor el remedio que la enfermedad... la calvicie es un tema muy chungo aunque ahora se hacen milagros... pero tu protagonista no se fió, supongo que a causa de la fobia, como el pez que se muerde la cola.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola MJ, es que como tu dices la calvicie para mi protagonista se convirtió en una fobia y trató de buscar remedio pero no le convenció.
EliminarMuy agradecida por tu paso por aquí y por el comentario.
Un abrazo
Puri
Madre mía pobre hombre tanta fatiga para que al final no le pudieran arreglar el problema, bueno más bien que él no se dejó porque le daría mucho miedo que le arrancaran los pelitos que sí tenía bien enganchados a la cabeza. Lo has relatado tan bien Puri, he padecido con el hombre y luego he sonreído con el final porque por eso si que él no iba a pasar jajaja ay que mala yo riéndome del pobrecillo.
ResponderEliminarUn beso enorme preciosa. Hasta el próximo día :*
Hola Lua me alegra mucho que vinieras hasta aqui y dejaras tu comentario.
ResponderEliminarMi prota quería que no le tocasen ni un pelo de los suyos y aprovecharan los que le habian caído ji ji ji.
Un besote y gracias.
Puri
Tus escritos estan lleno de vida de tu mente y tus palabras mi querida
ResponderEliminarGracias Mucha por venir a dar una vuelta por aquí y dejar tus cariñosas palabras.
ResponderEliminarUn abrazo
Puri