EL MIRÓN

Aquella posición en la que había sido puesta desde el principio la estaba matando . Tenía las cervicales totalmente agarrotadas y la cosa no tenía pinta de mejorar a pesar del tiempo transcurrido.

En ningún momento le informaron de las consecuencias que podrían acarrearle el estar tanto tiempo en la misma posición y eso no estaba bien.Su anatomía estaba a la vista de todos y desde el primer momento todo fueron halagos y felicitaciones para él ,sin importar las consecuencias físicas que esto podría acarrearle a ella.

Cada mañana cuando abrían las puertas, se preguntaba si acaso no era ella tan o más importante que él, quien fue primero “ el huevo o la gallina”. Si las cosas no mejoraban estaba dispuesta hacer una locura.

Aquel día alguien se sentó frente a ella y la miró durante un buen rato.

(Imagen de internet)

—Que me miras,

—Hablas conmigo

—Con quien va a ser

—No te miro, te admiro, estás fantástica

—Eso me dicen todos,

—Denoto cierto descontento

—Te has parado a pensar si es cómoda mi postura......

—Señor le pasa algo, ¿está usted bien?

—Porqué lo pregunta

—Como lo veo hablar solo

—Estaba admirando la belleza del conjunto.

—Entiendo su admiración, pero si desea algo puede pasar por la entrada y le atenderé ,ahora tengo que seguir con mi ruta.

—Continúe con su vigilancia, que yo estoy bien.

Parece que nadie se compadece de mi, y las cervicales me están matando, mucho cojín, mucho cojín, pero tengo los brazos anquilosados.

—No te preocupes, que yo te liberaré

—¿De verdad, harías eso por mí?.

Pasados unos días, se lee en la prensa local:

Desaparece el cuadro “ La maja desnuda de Goya” y en su lugar dejan una nota donde se puede leer:

" Ella me lo pidió, tenía las cervicales fatal y no aguantaba más".